¡Hola a todos!
A través de la actividad de reflexión número 20 se ha solicitado pensar en algún conflicto que se puede desarrollar en el aula. En este caso he pensado en poner de ejemplo las faltas de respeto verbales, ya que actualmente parece que se han normalizado en la sociedad y cómo no, también en las aulas.
Para trabajar este problema común en las aulas he pensado en hacerlo a través de lo que se denomina "mensajes tú y mensajes yo". Este técnica se utiliza para entrenar las habilidades sociales, más en concreto, cómo nos hemos sentido frente a una agresión verbal.
Por ejemplo: Un grupo del colegio se encuentra en el descanso entre dos actividades y están en el pasillo. María lleva puestos unos cascos y no es consciente de que una de sus compañeras de clase le está hablando (Lucia), por lo que ésta le dice: ¡Pero María, qué pasa! ¿eres tonta o te lo estás haciendo? ¿no ves que te estoy llamando? Sin duda en este punto podemos afirmar que Lucía ha cometido una falta de respecto verbal hacia su compañera.
En este punto, María, tendrá dos opciones:
- Contestar con un mensaje del tipo "tú": ¡La tonta eres tú, déjame en paz!
- Contestar con un mensaje del tipo "yo": Lo siento, Lucia, pero la verdad no me he dado cuenta de que me habías llamado, porque, como verás, tengo puestos los cascos. Me siento triste por cómo me has hablado, pero para otra vez, si quieres tócame el hombro, así puedo darme cuenta de que quieres hablar conmigo.
Tania debo decirte que estoy totalmente de acuerdo contigo. La mayor parte de las veces, como ya decía Maquiavelo, se ataca o por miedo o por odio. Yo personalmente pienso que la mayor parte de las veces es por miedo y por un miedo muy especial. Creo que las emociones en nuestra sociedad están muy vinculadas con el mundo privado, con lo propio o con lo subjetivo. A menudo esta vinculación ocasiona que la gente tenga miedo a expresar sus propias emociones, por miedo a que choquen frontalmente con las de los demás. Lo cual es paradójico, porque muchas veces experimentamos las mismas emociones y no nos damos cuenta. ¿Estás de acuerdo conmigo? Si es así, ¿cómo crees que podríamos atacar este problema?
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